¿Puedo volar si llevo escayola?
Sí, puedes volar escayolado, pero hay algunas cosas a las que debes prestar atención. Debido a las diferencias de presión en la cabina se te pueden hinchar las manos y los pies, lo que puede provocar que las escayolas cerradas te aprieten demasiado.
Con la preparación adecuada, volar escayolado no supone ningún problema. Ponte en contacto con tu traumatólogo para que te coloque una férula, un aparato ortopédico o una escayola desmontable. Gracias a estas opciones, sentirás menos molestias con las diferencias de presión. Además, a veces también ayuda que se corte la escayola o se abra longitudinalmente.
A pesar de todo, ¿vuelas con una escayola cerrada? Procura llevar un certificado médico que indique que puedes viajar con una escayola cerrada en una cabina presurizada.
Es bueno saber: Transavia no ofrece servicio de reposapiernas. Tampoco aceptamos camillas a bordo. Por tanto, no existe la posibilidad de que te sientes con la pierna en alto. Por razones de seguridad, debes sentarte erguido durante el despegue y el aterrizaje. Si no puedes respetar esta norma, lamentablemente no podrás volar.
Estaremos encantados de ayudarle!